CUÁNDO QUITAR EL PAÑAL A NUESTRO HIJO

Esta es una de las preguntas que más inquietan a los padres desde siempre. A menudo somos los adultos los que fijamos el momento adecuado para hacerlo y este coincide con la llegada del buen tiempo. Pero no debemos olvidar que el control de los esfínteres no solo se aprende, también depende del sistema nervioso central y se adquiere cuando el niño está maduro para ello.

Normalmente el pañal podrá ser retirado hacia los dos años, ya que a esta edad es cuando el niño habrá adquirido cierta automía y será capaz de controlar la mayoria de sus funciones. Además a esta edad escapaz de comunicarse con los demás con mayor fluidez, de modo que nos expresará verbalmente su deseo y necesidad de ir al baño.

Debemos tener en cuenta que para un niño la retirada del pañal es un proceso lento y uno de los más importantes, es  el resultado de un proceso que tiene idas y vueltas, es decir, no es lineal y admite equivocaciones, errores y soluciones, como todo nuevo aprendizaje. Para ello debe tener la seguridad de que las personas que le ayudaran están a su lado de manera serena y

paciente. debe sentir que el adulto confia en él, que no pasa nada si en alguna ocasión no es capaz de controlar sus esfínteres y que compartiremos su alegría cada vez que consiga hacerlo en le baño.

Qué debemos tener  en cuenta para facilitar este proceso

• Hablar con el niños sobre el tema para que comprenda las implicaciones que ello conlleva y si muestra interés lo motivaremos a través de cuentos.
• Es conveniente que la retirada del pañal no se de a la vez que otras circunstancias: retirada del chupete, nacimiento de hermanito,adaptación a la escuela...etc, ya que las situaciones de stess no facilitan las transiciones de este tipo.
• En caso de que asista a la Escuela Infantil es muy importante que educadoras y familia trabajen en la misma dirección para evitar confundir al niño.
• Tener en cuenta el miedo a sentarse en el inodoro y valorar el uso del orinal.
• Usar ropa cómoda para facilitar la autonomía lo maximo posible y llevar siempre ropa de repuesto.
• Debemos distinguir entre el control diurno y nocturno. En la primera fase es mejor llevarlo a cabo solamente por el día. durante la noche el proceso puede ser más lento.
• No debemos olvidar que cada niño tiene su propio proceso y ritmo. Si respetamos esto los resultados del proceso serán positivos.
• Debemos contar con grandes dosis de paciencia, cariño y comprensión.